Así es como se reparan tejidos rápidamente en Clínica La Parva: Cámaras Hiperbáricas

Luego de ciertas cirugías, lesiones, carreras deportivas o tratamientos para el cáncer, se recomienda el uso de estas cámaras.

Tuviste esa carrera de 20 kilómetros por la que te preparaste meses, y quedaste sin fuerza muscular. Peor, quedan solo tres meses para la competencia y te esguinzaste el tobillo, o te desgarraste. Te sometiste a la cirugía que tanto esperabas y necesitabas, y quieres una recuperación eficiente, rápida. O la radioterapia para tratar el cáncer te está afecta muchísimo. 

Para todo esto, y más, están las cámaras hiperbáricas. Éstas tienen como objetivo reparar tejidos de forma rápida con la ayuda de oxígeno pero ¿Cómo? Estas camas están completa y herméticamente cerradas a alta presión que gracias al oxígeno ayuda a la oxigenación de los tejidos.

El caso contrario, por ejemplo, sería fumar cigarros que lo que provoca es disminuir el oxígeno perisférico en la sangre, por lo que la calidad de la piel baja, salen más arrugas y se irrita con facilidad. 

Cuando hay cualquier tipo de lesión o eres fumador, existe una privación de oxígeno, y lo que las cámaras hiperbáricas hacen es revertir esa situación, dándole a la sangre el oxígeno necesario para nutrirse. 

A toda persona que se somete a una abdominoplastía o pexia mamaria, por ejemplo, siempre después de cirugía se recomienda empezar un tratamiento en las cámaras hiperbáricas. En el caso de personas que padecen cáncer, la radioterapia puede dejar lesiones internas en sus órganos por lo que sus médicos los derivan a centros con cámaras hiperbáricas para que con el oxígeno extra puedan tener una mejor recuperación.

Pero no todos son aptos para ingresar a este tipo de tratamiento y por eso siempre es necesaria una evaluación previa. Por ejemplo, cualquier persona que padezca de alguna enfermedad de presión alta, no puede ingresar a las cámaras.

¿Sirve para aliviar el dolor de artritis o de la fibromialgia?

Es importante tener claro que las cámaras hiperbáricas no son, en ningún caso, para aliviar el dolor. Su objetivo es ayudar a reparar tejidos, por lo que personas con artritis y fibromialgia no deberían someterse a ellas ya que no habrá ningún efecto, ni negativo ni positivo.